Este tipo de pan tuvo su origen a finales del siglo XVI en las comunidades judías de Europa del Este, y encontró la cima de su fama al llegar a los Estados Unidos de la mano de los inmigrantes. La popularidad de los bagels tal vez se deba a que es un plato sencillo de preparar, económico y muy versátil a la hora de combinar sabores. Además, la forma tradicional de anillo permite una cocción rápida y una forma práctica de transportarlo para los vendedores ambulantes. ¿Se puede pedir más?
Hoy en día podemos ver en todo el mundo carros y tiendas que se dedican a la venta exclusiva de bagels de los más variados sabores con rellenos que se adaptan a la idiosincrasia culinaria de cada lugar. Para muchos neoyorquinos un bagel untado con crema ácida es un desayuno ideal, mientras que en nuestro país los rellenos son copiosos y variados. De cualquier manera, su corteza gomosa y su miga suave son deliciosas por sí solas y valen la pena cada segundo en la cocina.
¿Ya quieren saber como prepararlos? Empecemos por los secretos… Los bagels, como cualquier masa de levadura, adquieren un sabor más profundo a mayor tiempo de leudado. Esto quiere decir que, siempre que tengamos tiempo, es preferible dejar descansar la masa en en la heladera durante toda la noche. Este secreto es en realidad muy útil porque permite avanzar con la preparación de sus panes para desayunos o eventos y no tener que esperar a último momento.
Ahora, la cocción. La textura de estos panes es gomosa y eso se obtiene mediante una doble cocción. ¡Ajá! ¡Los sorprendimos! La primera cocción tiene como fin evitar que se forme una cáscara crujiente y esto se consigue sumergiendo el bagel ya leudado en agua hirviendo. A continuación, se hornea para conseguir ese bellos dorado caribeño. Oh…
Como cualquier masa, su momento de gloria ocurre ni bien sale del horno: aroma, textura y sabor son perfectos. Sin embargo, es una masa que se puede guardar en un recipiente hermético por dos días o en el freezer por hasta tres meses y luego “restaurar” en el horno con excelentes resultados. No recomendamos calentar en microondas ya que altera mucho la textura.
Pasemos a lo importante, la receta.
Ingredientes:
– 1k harina 0000
– 10g levadura en polvo (1 sobre)
– 2 cdas. azúcar
– 5 g sal
– 75g manteca pomada
– 600 cc de agua (aprox.)
– 1 cda. bicarbonato de sodio
– 1 yema para pintar
– Sal marina, semillas de sésamo/chía/amapola para decorar
Procedimiento:
*Puede prepararse con una batidora de pie utilizando el gancho de amasar.
- En un bowl grande colocar todos los secos, excepto el bicarbonato. Mezclar con cuchara de madera.
- Agregar de a poco el agua hasta lograr una masa desprolija pero sin harina suelta. Si utilizan batidora queda una masa pesada que se despega de los bordes. En este punto se puede ir agregando la manteca pomada de a trozos.
- Amasar muy bien hasta notar que la masa es suave y elástica y no queden trozos visibles de manteca. En batidora lleva unos 5 minutos a velocidad baja.
- Cubrir con film y dejar leudar a temperatura ambiente si se va a utilizar en el momento, o en heladera si se desea postergar la cocción.
- Forrar con papel manteca dos placas de horno grandes.
- Precalentar el horno a 175º
- Una vez leudada la masa, desgasificar (aplastar con suavidad para dejar salir el gas resultante del leudado) y dividir en porciones de unos 110 g.
- Tomar una porción y formar una “soga” de unos 20 cm. Unir los extremos y presionar con los dedos. Rodar el bagel para que quede un anillo parejo.
- Acomodar en la placa los bagels dejando una separación entre sí. Cubrir con un paño de cocina y dejar leudar a temperatura ambiente durante 25/30 minutos.
- Una vez pasado el tiempo de leudado, poner 1 litro de agua en una cacerola y llevar a hervor. Agregar el bicarbonato. Esto va a mantener el agua en efervescencia durante todo el hervor.
- Tomar con cuidado un bagel y colocarlo en el agua hirviendo. Cocinar por 30 segundos, dar vuelta y dejar otros 30 segundos más. Retirar y colocar sobre la placa.
- En un recipiente pequeño, batir la yema con una cucharada de agua. Pintar los bagels y topicar con semillas de sésamo u otra.
- Hornear durante 20/25 minutos hasta lograr un tentador color dorado.
Listo. Están preparados para dar un paso más en sus recetas. Los bagels son ideales para un brunch de domingo, para las viandas del colegio o la oficina o aún para la picada antes del asado. Prueben hacerlos en un tamaño más pequeño para armar bocaditos. Hay miles de posibilidades y les prometemos que en sus familias las van a adorar a todas. //